Costumbrismo juvenil de principios de década

-Joder, he venido desde el Campus corriendo.

-Es lo que tienen los ataques de zombis, que el transporte público se satura…

-¿No te parece muy fuerte que de verdad estemos viviendo una epidemia de zombis asesinos?

-¿Pero tú crees que son zombis o infectados? No es lo mismo.

-Y yo qué sé lo que son, no le he preguntado a ninguno. ¿Han dicho algo en la tele?

-Matías Prats ha dicho que cerremos puertas y ventanas, y que si vemos a alguien a quien le han mordido, sea familiar o amigo, le peguemos un hachazo en la cabeza. Luego ha dicho nosequé de un bebé de oso panda que ha nacido en el zoo de Berlín.

-No tenemos hacha.

-Cualquier objeto contundente valdría.

-¿Y tú que has hecho hoy? No veas cómo lo he pasado yo en la uni con toda la gente corriendo como pollos sin cabeza. Y he visto como el profesor de Derecho Romano, ahora convertido en zombi/infectado le sorbía el cerebro a la Consuelo Navarrete. Que se joda, eso por no dejarme los apuntes.

-Yo es que anoche me acosté tarde haciendo nada y me he levantado hace un par de horas. Me he enterado del ataque por Facebook mientras desayunaba. Y me he hecho fan de “Señoras que son zombis” y “Yo sobreviví al ataque de zombis del 2010”

-Por lo que veo a través de la ventana el ataque de zombis aún no ha terminado, así que no cantes victoria tan rápido. Por cierto, me debes 14 euros de la factura del gas.

-Tengo un billete de 20. ¿Bajas al bar a cambiar?

-¿Quién coño está chillando?

-Debe ser que la de abajo ya no es nuestra vecina, sino un zombi comesesos.

-Ya no se oye

-Su marido ha debido de hacer caso a Matías Prats.